Una
hipótesis es una idea o conjunto de ideas, para la explicación o comprensión de
un determinado fenómeno, o sobre la eficacia o eficiencia de un proceso o
sistema. Por principio, en la medida que toda hipótesis es un producto
fisiológico superior o abstracto, una idea o un conjunto de ideas, generadas
fisiológicamente, por su propia naturaleza fisiológica, en Introducción a la Probabilidad Imposible toda hipótesis es una hipótesis empírica.
En
Introducción a la Probabilidad Imposible cabe diferenciar diferentes tipos de
hipótesis empíricas, de una parte las
hipótesis teóricas, las hipótesis explicativas, y las tecnológicas.
Una
hipótesis teórica es aquella que sólo puede ser formulada y demostrada
teóricamente, sin que pueda ser puesta a prueba o haber evidencias empíricas, por
ejemplo, las hipótesis de supuestos estrictamente lógico matemáticos, o de
aspectos de las ciencias empíricas que no puedan ser comprobables material o
estadísticamente, o de cualquier disciplina formal, que por su carencia de
objeto de conocimiento empírico, todo problema y solución se plantea sólo y
exclusivamente de manera formal. Un ejemplo de hipótesis empírica de carácter exclusivamente
teórica es la antinomia lógica kantiana establecida en el debate sobre si el
universo es infinito o es finito. Frente a la hipótesis el universo infinito
existe su opuesta, el universo es finito. En la medida que carecemos de pruebas
empíricas que refuten o demuestren una u otra hipótesis, debido al carácter formal
de la pregunta, si el universo es infinito o finito, cualquier hipótesis en
este sentido, al menos de momento, de forma provisional, sólo se pueden
considerar hipótesis empíricas de carácter teóricas al no haber modo alguno de
solucionar empíricamente, en la práctica, la respuesta a este dilema.
El
motivo por el cual Kant aludía a que se trataba de una antinomia lógica es que
al carecer de prueba alguna suficiente para demostrar ninguna de las dos
hipótesis, podían deducirse de sus premisas originales tantos argumentos en
defensa de la una o la otra, sin que pudiera forma material de demostrar
ninguna.
Mientras
las hipótesis empíricas de carácter teóricas son aquellas que siendo empíricas,
de origen fisiológico, no pueden demostrarse materialmente, salvo por
razonamientos lógico formales, que pueden dar lugar a antinomias lógicas, las
hipótesis empíricas explicativas o tecnológicas son aquellas hipótesis
empíricas que si pueden ser demostradas material o estadísticamente mediante
pruebas materiales o estadísticas, que las refuten o demuestren de forma
provisional.
Una hipótesis
empírica explicativa, también llamadas en Introducción a la Probabilidad Imposible hipótesis explicativas, es aquella idea o conjuntos ideas que tiende,
de la forma más isomorfa posible, a dar una explicación sobre un determinado
fenómeno de la realidad, mientras las hipótesis empíricas tecnológicas, o
simplemente llamadas hipótesis tecnológicas en Probabilidad Imposible, son
aquellas hipótesis que se basan en un supuesto hipotético de comportamiento,
eficacia y eficiencia, efectividad, de un determinado dispositivo tecnológico.
Un
ejemplo de hipótesis explicativa, la hipótesis del Big Bang en física y
astrofísica, o la hipótesis de la evolución de las especies en función de su
capacidad de adaptación al medio dependiendo de mutaciones genéticas . Un
ejemplo de hipótesis tecnológica, las hipótesis de nivel de resistencia y
eficiencia de una máquina antes de someterla a prueba.
Dentro
de los tres tipos de hipótesis empíricas: teóricas, explicativas y
tecnológicas; la diferencia entre las hipótesis empíricas de carácter teóricas
frente a las explicativas y tecnológicas , es las hipótesis teóricas no se
pueden demostrar material ni estadísticamente, mientras las hipótesis
explicativas o tecnológicas si se pueden demostrar material o
estadísticamente mediante pruebas
científicas, materiales o estadísticas
Precisamente
debido a que sólo las hipótesis explicativas o tecnológicas son las que se
pueden someter a prueba, a diferencia de las teóricas, es el principal motivo
por el cual en Introducción a la Probabilidad Imposible cuando se alude a las
hipótesis empíricas, especialmente en el apartado 13, se menciona a estos
modelos de hipótesis empíricas, explicativas o tecnológicas, en tanto que
susceptibles de la crítica racional, a diferencia de las hipótesis teóricas,
abordadas parcialmente en el apartado 7 dedicado a la hipótesis del universo
infinito que se apoya en Introducción a la Probabilidad Imposible, manteniendo viva
la tradición del racionalismo crítico.
Sea el modelo de hipótesis, teórica,
explicativa o tecnológica, toda hipótesis es por igual de carácter empírica
reside a que su elaboración ha sido de forma completamente fisiológica, luego
subjetiva, empírica.
Para
entender el motivo por el cual en la epistemología de Introducción a la Probabilidad Imposible se parte de una teoría del conocimiento en la cual toda
hipótesis es empírica, aunque carezcan de solución práctica, como el caso de
las teóricas, se debe a que toda hipótesis en tanto que producto neurológico,
es el producto superior o abstracto final de la fisiología humana, y todo
producto fisiológico, por cuanto es de orden subjetivo, no puede ser menos más
que empírico.
Lo
empírico es empírico debido a su naturaleza fisiológica y subjetiva. La forma
con que el cerebro procede a la elaboración de hipótesis es mediante la síntesis
de ideas, que materialmente supone la síntesis cerebral de sustancias
electroquímicas, cuyo resultado final es la producción ideas, y de todas las
ideas que produce la síntesis electroquímica del cerebro sólo se llamarán
hipótesis científicas aquellas que tengan pretensión de objetividad, siendo en
cualquier caso de origen empírico, por cuanto no sólo las ideas producidas
fisiológicamente han sido elaboradas por la propia síntesis cerebral del
individuo, o en del debate o intercambio de información entre personas, mediatizados
por los filtros de sus propios sistemas
fisiológicos sensoriales, y cerebrales, es que a su vez la forma en que esas
ideas previas, premisas, sobre las que la personal individual, o conjunto de
personas en el debate, han llegado a una determinada síntesis de ideas, a nivel
fisiológico una síntesis electroquímica determinada, ha sido a través de ideas
previas, premisas, a las cuales han accedido ya de forma sensorial directa, la
percepción directa de fenómenos, o por la mediación social en cualquier caso
mediada por los procesos sensoriales implicados en la comunicación y el debate.
Sea cual sea el origen de las ideas previas, premisas, sobre las que se procede
a la síntesis de esas ideas, síntesis electroquímica, es en cualquier caso
también de naturaleza empírica, mediatizada empíricamente por la propia fisiología,
obviamente, si toda hipótesis ha sido gestada de forma empíricamente
fisiológica, por definición y origen toda hipótesis sólo puede ser una
hipótesis empírica.
A
diferencia de cualquier otra idea que produce el cerebro humano o el debate
entre seres humanos, las hipótesis se diferencian de cualquier otra idea
diferente por la sencilla razón de que las hipótesis científicas tienen
pretensión de objetividad, si bien, dentro de las hipótesis científicas las
únicas que podrán criticarse racionalmente serán las explicativas o
tecnológicas, dado que las teóricas no se pueden demostrar ni material ni
estadísticamente, salvo por argumentos lógicos o matemáticos, aunque pueden generar
antinomias lógicas.
Aquellas
hipótesis empíricas, explicativas o tecnológicas, que no precisen de pruebas
estadísticas se podrán demostrar mediante pruebas materiales, y aquellas
hipótesis empíricas que necesiten de una demostración estadística podrá hacerse
mediante estadística descriptiva o la crítica racional.
Rubén
García Pedraza, Chile a 16 de noviembre del 2013